Los problemas de conducta en la adolescencia se caracterizan por un desajuste en el comportamiento, llegando a alterarse así mismos y/o al entorno en el que se encuentran, en diversas ocasiones el trastorno de conducta ha sido diagnosticado en la infancia y se destaca por manifestar comportamientos antisociales.
Consecuencias
Algunos de los comportamientos que se pueden dar provocados por los problemas de conducta son:
- Absentismo escolar
- Escaparse de casa
- Violación de los derechos ajenos (robo)
- Agresión física y/o verbal, al grupo de iguales o figuras de autoridad
- Conductas de impulsividad
- Consumo de sustancias
Este tipo de conductas llegan a desestabilizar el ambiente familiar, generando discusiones constantes y enfrentamientos, por lo que los padres se quejan de tener un adolescente con conductas antisociales y en muchas ocasiones los padres no poseen las herramientas para orientar dichas conductas de forma adecuada.
Hay que evitar que las relaciones entre padres e hijos se deterioren, ya que realmente para el adolescente su única fuente de apoyo es el núcleo familiar, por lo que es fundamental contar con un asesoramiento profesional por parte de un psicólogo, quien puede apoyar tanto a los padres como al chico/a en conflicto.

Tratamiento
El tratamiento busca extinguir las conductas inapropiadas que presenta el adolescente y reducir el malestar que se tiene en el entorno familiar, para ello contamos con la Terapia de Aceptación y Compromiso, en donde uno de los objetivos fundamentales es generar a través de la intervención terapéutica un ambiente adecuado tanto para el chico como para los padres.
Los ejercicios trabajados en la terapia estarán enmarcados en dirección a metas relevantes para el adolescente. Igualmente se trabajaran técnicas basadas en la autoestima, en manejo de las emociones y comportamientos basados en sus valores.
Si en vuestro hogar tenéis un adolescente con problemas, podemos trabajar en equipo y conseguir que mejore su calidad de vida y también la de sus padres.
¡No dudes en comunicarte con tu psicóloga!

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